¡La educación en nuestra bella Colombia!

Es un tema serio y grave, es algo de lo que si vale la pena hablar, la educación en Colombia, va más allá de cualquier otro post que se haga.
El sistema está mal y lo sabemos, el problema es arreglarlo, pero para arreglarlo tenémos que saber donde está mal, por donde nos estamos desangrando.

Hablamos de un sistema donde el alumno no está aprendiendo, "juega" a conseguir la nota, NO a aprender, se cambia el aprender, por un insulso excelente, que al final, para la vida, no le va a servir de nada.
Pero a eso estamos acostumbrados y muchos lo saben pero no lo denuncian, tomándolo como algo demasiado normal. No es así, tenemos derecho a aprender, y en mi condición la obligación de hacerlo. El problema está en que no existen profesores, básicamente (y haciendo unas pocas excepciones) LOS PROFESORES NO EXISTEN, esos grandes inspiradores, maestros y guías en nuestro camino... no existen el sistema se encargó de acabarlos.

Y sí, de nuevo el sistema, cómo es posible que un soldado gane más plata por matar gente y/o por dar órdenes (en los altos cargos militares son pocos los que aún arriesgan su "vida por la patria") que un maestro, ¿como es posible que una persona que se encarga de la "Seguridad" gané más dinero que aquel que está con sus manos construyendo país?
Los profesores están haciendo el país, están enseñando a los dirigentes del mañana cómo gobernar, a los pensadores del futuro, como pensar, a los soñadores del mañana... ¡como soñar!

Es triste ver como generación tras generación de colombianos marchitan sus sueños y ganas de salir adelante por la simple razón de que existe un sistema que no nos lo permite.

El problema es que los profesores no sienten la satisfacción que debería traerles el ser constructores de país, se sienten obligados a realizar su profesión recibiendo a cambio unos tristes centavos...
¿A quién le darían ganas de ser profesor a cambio de sacrificar su vida al no recibir remuneración alguna?
Los profesores se están perdiendo y con ellos nos estamos perdiendo nosotros... generación tras generación desarrollando vidas con las que jamás pensamos lidiar, ¡dejando a nuestros sueños y a nuestras vocaciones guardadas en algún lugar del que tal vez nunca saldrán!

Sin embargo, hemos de luchar contra la corriente, todos unidos lo lograremos, ¡sigamos luchando por alcanzar nuestros sueños!